CONJUNTO RUPESTRE EN EL TOBAZO. ¡ ASOMBROSO!


En el impresionante entorno del Tobazo, justo en el lugar donde el Río Ebro sale de Cantabria camino de la Meseta, se encuentra el conjunto rupestre del Tobazo. Imponentes paisajes horadados de los cañones del Ebro nos muestran la fuerza de la naturaleza.
En uno de los farallones y sobre la toba calcárea precipitada por una surgencía acúifera subterranea esta excavado el conjunto rupestre. El agua siempre ha suscitado un sentimiento religioso en el hombre desde todas las civilizaciones y en este espacio su presencia es notable.
En el tobazo se plantea la hipótesis de que pudo ser un lugar elegido para instalar un culto pagano y precristiano. Más tarde ya se cree que en el siglo III ya pudo haber una liturgía cristiana antiquísima en este hermoso lugar. De todos los conjuntos rupestres de la zona es el único que no esta realizado sobre roca arenisca wealdense sino sobre la toba, que es una roca porosa y facimente manejable.
Por su ubicación, dimensiones, dificultades de acceso y carencia de bancada en su entorno para los asistentes como en el resto de iglesías rupestres, se cree que fué de uso eremitico para un reducido número de anacoretas. En todo momento uno comprueba la singularidad del entorno y la fuerza del lugar. Todo el conjunto son cuevas habilitadas, eran formaciones naturales que a base de pico fueron acondicionadas eliminando estalactitas y demás.
El conjunto lo componen tres cavadidades excavadas en la roca, en todo momento se puede estar de pie. De ellas solo la central tiene caracter litúrgico. Al entrar uno puede observar una tumba de bañera excavada en la roca bajo el arcosolio. Otra parte podría haber sido la zona donde se velaba a los monjes conocida como " Memorium".
La zona de la iglesía es la más elaborada de todo el conjunto. Aquí ya encontramos una hornacina rematada en arco de medio punto con una cruz latina grabada en su fondo. El ábside orientado al este, un altar que quizá sea el más antiguo y pequeño de Cantabria, Hornacina con una cruz griega de brazos iguales grabada sobre la pared, todo ello forman un espacio litúrgico muy especial.
Unos conductos naturales comunican con las otras cavidades, la erosión esta presente pero no por ello uno no deja de asombrarse por el lúgar, por el impresionante entorno y uno se pregunta que andarían buscando estos monjes al instalarse en un espacio como este.
Ascendiendo unos metros por encima del conjunto nos encontramos con la cueva de la que surge el caudal acúifero que durante años ha venido conformando su cascada natural, las panorámicas son impresionantes, el sonido, la luz, todo ello nos confirma que el rupestre en esta zona no deja de sorprendernos y trasladarnos a otra espiritualidad.
Espectacular conjunto rupestre y entorno natural que confirman que la visita a este lúgar será nuestro mejor tiempo invertido en mucho tiempo. Una maravilla de espacio. Ya lo sabían todos los que en épocas pasadas vieron en este espacio algo diferente.