Hace poco se inauguró el Parque de Aventuras el Robledal del Oso en Cervera de Pisuerga en el entorno de nuestro territorio y como estámos en zona fronteriza, tenemos la oportunidad de tener otro en Santander, los dos a una hora más o menos de distancia. El sábado decidimos disfrutar de una jornada de cumpleaños en uno de ellos y por el viento sur que soplaba, el buen tiempo estaba en Santander.
Situado en el entorno del faro de Cabo Mayor en Santander capital, este parque forestal puede presumir de estar en un espacio privilegiado. La zona es preciosa y en un día limpio de otoño y asurado como el sábado, toda la costa se dibuja nitidamente. Nunca había estado en un parque de este tipo y para pasar una jornada de ocio sostenible y de actividad al aire libre, pueden ser una buena opción.
Una familia de dos chavales menores de 11 años por ejemplo, tienen que entrar los dos adultos y los dos chavales. En total te sale la entrada por 70 euros los cuatro. Los chavales no pueden entrar solos, por lo tanto no es una actividad barata. En este parque en concreto, tienen dos recorridos, uno para menores de 11 años y que se llama Descubrimiento y otro para mayores de 11 años que es el grande.
Una vez equipados con los arneses, los cascos de las peques, la polea... y una pequeña explicación por parte del monitor de la seguridad que debes ir teniendo en cuenta, te pones manos a la obra. Comienzas a descubrir escaleras, tuneles, tirolinas, pasos, puentes y demás... Lo más importante es ir cogiendo la seguridad al principio, los peques lo cogen muy rápido y estas cosas mejor irlas haciendo de pequeños porque de mayor uno esta medio trabado. Me lleva un tiempo empezar a disfrutar, solo el ir cogiendo el truco a la seguridad me tiene tenso, las peques si van más sueltas.
La idea, el entorno, el movimiento, las tirolinas, los puentes... van ayudando a afrontar nuevos retos y pasar un rato agradable. Cuando empiezas a soltarte, a encontrarte más relajado, es cuando se termina el circuito. Alrededor de hora y media hemos estado, la sensación es de que se queda corto. Hasta los siete años, este circuito esta bien pero para el segmento de chavales de ocho a once años se quedan un poco chafados. En el circuito del parque del Robledal del Oso en Cervera, si tienen un circuito para chavales de 8 a 11 años.
Llevan ya un tiempo abiertos y hablando con el monitor le comentamos que se tenian que enrollar con este sector de chavales ya que sino la sensación global se queda un poco escasa. La idea de ocio, exportada de la zona de Francia, que llevan muchos años trabajando estos parques, es muy buena y se trata de una excelente forma de pasar una jornada de ocio en familia. Actividad física, aire libre, coordinación, aventura, árboles y retos... todo ello configuran una excelente mezcla para pasar una jornada de ocio.
Deben escuchar las sugerencias y las sensaciones de los visitantes como todos los establecimientos de turismo y este parque debe invertir en un circuito nuevo para ese sector de chavales de 8 a 11 años para completar su oferta. Otro día hablaremos del circuito del Robledal del Oso que si tiene más circuitos y lo que si podemos recomendar es que puede ser una excelente opción de pasar una jornada de ocio familiar en estos parques. Deporte, actividad física, coordinación, superación de retos, aire libre, diversión... son suficientes motivos para fomentar este tipo de ocio sostenible en entornos naturales.
La sensación en turismo es global y el día ha estado muy bien pero tienen que mejorar un poco el producto para que uno salga con la sensación completa. Lo mismo nos debe servir a nosotros en el territorio, escuchar a nuestros visitantes y ver por donde debemos mejorar para satisfacer las necesidades de todos ellos. Esa es la clave para que repitan o por lo menos transmitan una buena sensación a sus amigos. En el fondo eso es el turismo, sensaciones y emociones de cada uno. Al final es lo que cuenta y los más importante.
GALERIA DE FOTOS DEL PARQUE FORESTAL EN EL FARO DE CABO MAYOR EN SANTANDER.